Células de Administración Pastoral

¿Qué es?

Son grupos pequeños de cristianos (máximo 9 miembros) que se juntan para orar y compartir testimonios, estrategias, compromisos y necesidades que cada uno tiene en sus esfuerzos para traer más almas a Cristo y llevarlas a madurez.

¿Porqué surge?

Dentro del cuerpo de Cristo hay muchos cristianos que comparten el evangelio con amigos, familiares y desconocidos, o que imparten estudios Bíblicos de algún índole, pero la mayoría de sus esfuerzos no gozan del reconocimiento dentro de sus iglesias por no tener ellos un “titulo” o ocupar alguna posición dentro de la jerarquía eclesiástica. Por lo mismo dichos esfuerzos se hacen con mucha informalidad, poco compromiso, sin estrategia, y sin el apoyo o incentivo de las iglesias a las que asisten. Paradójicamente este esfuerzo informal que ha ocasionado que mucho fruto se pierda por la falta de seguimiento, es el que ha propiciado la mayoría del crecimiento en las iglesias. Sin embargo, las personas que exitosamente llegan a ir a la iglesia, sufren de la falta de discipulado y pastoreo por parte del liderazgo. La dinámica actual se limita a llevar a gente nueva para que “otros se encarguen de ellos”… y en muchos casos, aunque esas personas nuevas llegan a congregarse, carecen de un discipulado real que les permite crecer en su fe y dar fruto.

¿El propósito de la célula?

Eficientizar los esfuerzos del cuerpo de Cristo por cumplir la gran comisión.

Objetivos de la célula

1) Animarnos mutuamente escuchando del testimonio y del trabajo que cada uno está realizando.
2) Fomentar la seriedad y formalización del trabajo por medio del compartir nuestras estrategias, compromisos y planes de trabajo.
3) Apoyarnos mutuamente con oración, consejo y retroalimentación.

Limitantes

Los organizadores y los miembros de la célula reconocen que, por ser de naturaleza asociativa, no son autoridad sobre los integrantes de la célula, por lo que no se pide una rendición de cuentas por el trabajo de cada uno, ni se juzga el si se esta haciendo correcta o incorrectamente, ni se condena por diferencias denominacionales. Por lo tanto, los compromisos, planes de trabajo y estrategias que cada participante comparte son voluntarias y no impuestas por ningún otro miembro (al menos que haya una relación de autoridad entre ellos que así lo permita).

¿Quienes pueden participar?

Cualquier cristiano evangélico[1], sin importar su posición eclesiástica o denominación, que esté caminando en santidad y que esté tomando responsabilidad personal por evangelizar (compartir la palabra) y discipular (pastorear). Los participantes ya caen en las siguientes modalidades:
• Ya están evangelizando o discipulado a una o varias personas.
• Todavía no tienen ningún converso pero están trabajando activamente para ganar para Cristo algunas personas o grupo en particular.

Dinámica de la reunión

Hay un moderador que dirige la reunión de la célula. Se comienza con un oración, para luego compartir el trabajo que cada uno está haciendo, el cómo le está yendo y testimonios. Termina compartiendo las áreas de necesidad, sus peticiones de oración, sus estrategias, planes de trabajo o compromisos para avanzar en su ministerio. Al final oramos unos por otros por cada una de las peticiones.

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[1] Cristiano Evangélico es el creyente que cree que la Biblia es la Única Inerrante, Infalible y Verbalmente inspirada Palabra de Dios; cree literalmente en todo lo que la Biblia dice; juzga todas las cosas a la Luz de la Escritura (la Biblia) y es únicamente juzgado por la Escritura; cree en las verdades fundamentales de la fe cristiana histórica: La Trinidad, la Encarnación, el nacimiento virginal de Cristo, la muerte vicaria de Cristo, la resurrección corporal de Cristo, su ascensión al Cielo y su Segunda Venida, el Nuevo Nacimiento mediante la regeneración del Espíritu Santo, la Resurrección de los santos para vida eterna y la de los impíos para juicio final y castigo eterno en el infierno, la comunión con los santos, los cuales son el Cuerpo de Cristo.