Jesús en la Biblia 7: Abraham tipo de Cristo

Youtube: https://youtu.be/D6LFAwsw0sg

  1. Repaso

    1. La creación = la redención
    2. Adán = Cristo
    3. Árbol de la vida = Cristo
    4. La profecía = Cristo
    5. Abel = Cristo
    6. Enoc = Cristo
      1. Matusalén = iglesia
      2. Diluvio = juicio de Dios sobre la tierra
      3. Noé = Israel
      4. Posdiluvio = milenio
    7. Abraham = Cristo
  2. Abraham, tipo de Cristo

    1. Deja su tierra y su parentela

      1. Abraham deja su tierra y su parentela
        El Señor dijo a Abram: Deja tu tierra, tus parientes, la casa de tu padre y ve a la tierra que te mostraré. (Gn.12:1)
      2. Jesús deja el cielo y a su padre
        Nadie ha subido jamás al cielo sino el que descendió del cielo, el Hijo del Hombre (Jn.3:13); el dejó a su Padre y la casa de su Padre (Jn.14:2)
    2. Se le promete ser una gran nación, fama, renombre, ser de bendición y la maldición de todos los que lo aborrecen

      Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abraham y a su simiente. No dice: «Y a las simientes», como si hablara de muchos, sino: «Y a tu simiente», como de uno, que es Cristo. (Ga.3:16)

      1. Abraham
        Haré de ti una nación grande y te bendeciré; haré famoso tu nombre y serás una bendición. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan; ¡por medio de ti serán bendecidas todas las familias de la tierra!. (Gn.12:2-3)
      2. Jesús
        Cristo no es uno; sino un cuerpo con millones de creyentes (1Co.12:12,14,27); hizo su nombre famoso (Is.49:6,7; Fil.2:9-11); fuente de bendición a todas las familias de la tierra (Ga.3:13-14); todo el que lo aborrece o maldiga es maldito (1Co.16:22)
    3. Se le da la promesa que heredará la tierra

      1. Abraham: la tierra de Canaán
        1. Entonces el Señor se le apareció a Abram y le dijo: «Daré esta tierra a tu descendencia». Y Abram edificó allí un altar y lo dedicó al Señor, quien se le había aparecido. (Gn.12:7)
        2. Después de que Lot se separó de Abram, el Señor le dijo: «Abram, levanta la vista desde el lugar donde estás, y mira hacia el norte y hacia el sur, hacia el este y hacia el oeste. Yo te daré a ti y a tu descendencia, para siempre, toda la tierra que abarca tu mirada… ¡Ve y recorre el país a lo largo y a lo ancho, porque a ti te lo daré!» (Gn.13:14-17)
      2. Jesús: el mundo entero
        1. Pídeme, y como herencia te entregaré las naciones; ¡tuyos serán los confines de la tierra! Las gobernarás con puño de hierro; las harás pedazos como a vasijas de barro. (Sal.2:8-9)
        2. Dichosos los humildes, porque recibirán la tierra como herencia. (Mt.5:5)
        3. Los justos heredarán la tierra, y vivirán para siempre sobre ella. (Sal.37:29)
    4. No recibieron la promesa en esta fase de la vida

      1. Abraham partió sin haberla recibido —vivió como peregrino y extranjero
        Aunque todos obtuvieron un testimonio favorable mediante la fe, ninguno de ellos vio el cumplimiento de la promesa. (He.11:39)
      2. Jesús partió sin haber tomado posesión —vivió como peregrino y extranjero
        Todo lo sujetaste bajo sus pies. Porque en cuanto le sujetó todas las cosas, nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos que todas las cosas le sean sujetas. (He.2:8)
    5. No reciben la promesa sino hasta que venga el reino

      1. Abraham
        Tú irás hasta el fin, y reposarás, y te levantarás para recibir tu heredad al fin de los días. (Dn.12:13)
      2. Jesús
        Cuando el séptimo ángel tocó su trompeta, se oyeron fuertes voces en el cielo, que decían: «Los reinos del mundo han llegado a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.» (Ap.11:15)
    6. Su descendencia heredó la misma promesa

      1. Abraham heredó la promesa a su descendencia (su descendencia junto con él fueron coherederos)
        Por la fe radicó como extranjero en la tierra prometida y habitó en tiendas de campaña con Isaac y Jacob, herederos también de la misma promesa. (He.11:9)
      2. Jesús heredó la promesa a su descendencia espiritual (somos coherederos)
        Y si somos hijos, somos también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. (Ro.8:17)
    7. Hizo un pacto con él y su descendencia con el que confirmaba darle las promesas

      1. El pacto de la circuncisión de Abraham
        1. Jehovah sería el Dios de ellos
          Yo confirmaré mi pacto contigo y con tus descendientes después de ti, de generación en generación. Este es el pacto eterno: yo siempre seré tu Dios y el Dios de todos tus descendientes, y les daré a ti y a tus descendientes toda la tierra de Canaán, donde ahora vives como extranjero. Será posesión de ellos para siempre, y yo seré su Dios. (Gn.17:7-8)
        2. Como señal de la promesa y su fe, serían circuncidados
          Entonces Dios le dijo a Abraham: Es tu responsabilidad obedecer las condiciones del pacto. Tanto tú como todos tus descendientes tendrán esta responsabilidad de por vida. Este es el pacto que tú y tus descendientes deben cumplir: todo varón entre ustedes debe ser circuncidado. Debes cortar la carne del prepucio como señal del pacto entre tú y yo. De generación en generación, todo varón debe ser circuncidado al octavo día de su nacimiento. Esto incluye no solamente a los miembros de tu familia, sino también a los siervos nacidos en tu casa y a los siervos extranjeros que hayas comprado. Todos deben ser circuncidados. Llevarán en su cuerpo la marca de mi pacto eterno. (Gn.17:9-13)
        3. Si no tenían la circuncisión, serían excluidos de la familia y del pacto
          Todo varón que no sea circuncidado será excluido de la familia del pacto por romper el pacto. (Gn.17:14)
      2. El pacto de la circuncisión en el corazón de Jesús
        1. Dios celebra un pacto con nosotros
          «Este es el pacto que haré con ellos después de aquel tiempo», afirma el Señor, «pondré mis leyes en su corazón y las escribiré en su mente». Después añade: «Y nunca más me acordaré de sus pecados y maldades». (He.10:16-17)
        2. Dios circuncida nuestro corazón
          Un verdadero judío es aquel que tiene el corazón recto a los ojos de Dios. La verdadera circuncisión no consiste meramente en obedecer la letra de la ley, sino que es un cambio en el corazón, producido por el Espíritu. Y una persona con un corazón transformado busca la aprobación de Dios, no la de la gente. (Ro.2:29)
        3. Si no son circuncidados del corazón, son excluidos
           ¡Les digo que no! De la misma manera, todos ustedes perecerán a menos que se arrepientan (Lc.13:3) // Estos individuos son los que causan divisiones entre ustedes. Se dejan llevar por sus instintos naturales porque no tienen al Espíritu de Dios en ellos (Jud.1:19)
    8. El padre de la fe

      1. Abraham el padre de la fe
        Es más, cuando todavía no estaba circuncidado, recibió la señal de la circuncisión como sello de la justicia que se le había tomado en cuenta por la fe. Por tanto, Abraham es padre de todos los que creen, aunque no hayan sido circuncidados, y a estos se les toma en cuenta su fe como justicia. Y también es padre de aquellos que, además de haber sido circuncidados, siguen los pasos de nuestro padre Abraham, quien creyó cuando todavía era incircunciso. (Ro.4:11-12)
      2. Jesús el autor y consumador de nuestra fe
        Fijemos la mirada en Jesús, el autor y consumador de la fe. (He.12:2)
    9. Parecía que se iba a quedar sin descendencia, pero tuvo muchos descendientes

      1. Abraham
        Aun cuando no había motivos para tener esperanza, Abraham siguió teniendo esperanza porque había creído en que llegaría a ser el padre de muchas naciones. Pues Dios le había dicho: «Esa es la cantidad de descendientes que tendrás». Y la fe de Abraham no se debilitó a pesar de que él reconocía que, por tener unos cien años de edad, su cuerpo ya estaba muy anciano para tener hijos, igual que el vientre de Sara. (Ro.4:18-19)
      2. Jesús
        Al ser condenado injustamente, se lo llevaron. A nadie le importó que muriera sin descendientes ni que le quitaran la vida a mitad de camino… Formaba parte del buen plan del Señor aplastarlo y causarle dolor. Sin embargo, cuando su vida sea entregada en ofrenda por el pecado, tendrá muchos descendientes. Disfrutará de una larga vida, y en sus manos el buen plan del Señor prosperará. (Is.53:10)
    10. Sus descendientes vivieron como forasteros en la tierra

      1. Abraham
        Por la fe radicó como extranjero en la tierra prometida y habitó en tiendas de campaña con Isaac y Jacob (He.11:9) // Conforme a la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra (He.11:13)
      2. Jesús
        Queridos hermanos, les ruego como a extranjeros y peregrinos en este mundo que se aparten de los deseos pecaminosos que combaten contra el alma. (1Pe.2:11) // Ya que invocan como Padre al que juzga con imparcialidad las obras de cada uno, vivan con temor reverente mientras sean peregrinos en este mundo (1Pe.1:17)
    11. De 12/70 se convirtieron en multitudes

      1. Jacob: Doce tribus de Israel
        1. Doce tribus de Israel
          Jacob tuvo doce hijos: Los hijos de Lea fueron: Rubén, que era el primogénito de Jacob, Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zabulón. Los hijos de Raquel fueron: José y Benjamín. Los hijos de Bilhá, la esclava de Raquel: Dan y Neftalí. Los hijos de Zilpá, la esclava de Lea: Gad y Aser. Estos fueron los hijos que tuvo Jacob en Padán Aram. (Gn.35:22-26)
        2. Setenta familiares
          José tenía dos hijos que nacieron en Egipto. En total los familiares de Jacob que llegaron a Egipto fueron setenta. (Gn.46:27)
      2. Jesús: Doce apóstoles
        1. Doce apóstoles
          Estos son los nombres de los doce apóstoles: primero Simón, llamado Pedro, y su hermano Andrés; Santiago y su hermano Juan, hijos de Zebedeo; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el recaudador de impuestos; Santiago, hijo de Alfeo, y Tadeo; Simón el Zelote y Judas Iscariote, el que lo traicionó. (Mt.10:2-4)
        2. Setenta discípulos
          Después de estas cosas, designó el Señor también a otros setenta, a quienes envió de dos en dos delante de él a toda ciudad y lugar adonde él había de ir. (Lc.10:1)
        3. Jacob tipo de Cristo
    12. En lo que terminaba de formarse como nación vivirían bajo el dominio del un rey tirano

      1. La descendencia de Abraham: el rey de Egipto
        —Yo soy Dios, el Dios de tu padre— dijo la voz—. No tengas temor de descender a Egipto, porque allí haré de tu familia una gran nación. Yo descenderé contigo a Egipto y te volveré a traer (Gn.46:3-4) // Así fue como Israel se quedó a vivir en la tierra de Egipto, en la región de Gosén. Tomaron posesión de esa tierra, y se reprodujeron y se multiplicaron en gran manera. (Gn.47:27)
      2. La descendencia de Jesús: el príncipe de este mundo
        Mis amados hermanos, quiero que entiendan este misterio para que no se vuelvan orgullosos de ustedes mismos. Parte del pueblo de Israel tiene el corazón endurecido, pero eso solo durará hasta que se complete el número de gentiles que aceptarán a Cristo. Y entonces todo Israel será salvo. Como dicen las Escrituras: «El que rescata vendrá de Jerusalén  y apartará a Israel de la maldad. Y mi pacto con ellos es que quitaré sus pecados». (Ro.11:25-27) // Entonces fui testigo de un suceso de gran importancia en el cielo. Vi a una mujer vestida del sol, con la luna debajo de los pies y una corona de doce estrellas sobre la cabeza. Estaba embarazada y gritaba a causa de los dolores de parto y de la agonía de dar a luz. Luego fui testigo de otro suceso importante en el cielo. Vi a un gran dragón rojo con siete cabezas y diez cuernos, y una corona en cada cabeza. Con la cola arrastró la tercera parte de las estrellas en el cielo y las arrojó a la tierra. Cuando la mujer estaba a punto de dar a luz, el dragón se paró delante de ella, listo para devorar al bebé en cuanto naciera. Ella dio a luz a un hijo que gobernaría a todas las naciones con vara de hierro. Al dragón le arrebataron el hijo y lo llevaron hasta Dios y su trono. (Ap.12:1-5)
    13. Tenían la promesa de que vendría un libertador a sacarlos

      1. La descendencia de Abraham
        Entonces Jacob le dijo a José: —Mira, yo estoy a punto de morir, pero Dios estará contigo y te llevará de regreso a Canaán, la tierra de tus antepasados. (Gn.48:21)
        Un día, José les dijo a sus hermanos: «Ya estoy por morir. Pero Dios vendrá a visitarlos, y los sacará de esta tierra para llevarlos a la tierra que prometió dar a Abrahán, Isaac y Jacob.» (Gn.50:24)
      2. La descendencia de Cristo
        No se turbe su corazón. Ustedes creen en Dios; crean también en mí. En la casa de mi Padre hay muchos aposentos. Si así no fuera, ya les hubiera dicho. Así que voy a preparar lugar para ustedes. Y si me voy y les preparo lugar, vendré otra vez, y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, también ustedes estén (Jn.14:1-3) // El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre. (1Ts.4:16-17) 

        1. Moisés tipo de Cristo: que viene a liberar el pueblo
        2. El éxodo tipo de rapto: las cuatro copas servidas en la Pascua
          Las cuatro copas de la Pascua se basan en la promesa que Dios le hizo a Israel cuando envió a Moisés para que los liberara de Egipto. Él les dijo:
          “Por lo tanto, diles a los hijos de Israel: Yo soy EL SEÑOR; y yo los sacaré de debajo de las tareas pesadas de Egipto, y los libraré de su esclavitud, y los redimiré con brazo extendido, y con grandes juicios. Los tomaré como mi pueblo, y seré su Dios; y ustedes sabrán que yo soy el SEÑOR, su Dios, que los libró de los trabajos pesados en Egipto. Voy a llevarlos a la tierra por la cual levanté mi mano, y juré que se la daría a Abraham, Isaac y Jacob; y yo les daré esa tierra en propiedad. Yo el SEÑOR” (Ex.6:6-7).  Estos son los nombres de las cuatro copas (cita)

          1. “Los sacaré” (Vehotzeisi: Bringing Out): “los sacaré de debajo del peso de Egipto”, “los sacaré”
          2. “Los libraré” (Vejitzalti: Delivery): “los libertare de su servicio”
          3. “Los redimiré” (Vegoalti: Redemption or Blessing): “los redimiré con brazo extendido”
          4. “Los tomaré” (Velocajti: Taking out): “os tomaré como mi pueblo”
        3. Jesús tomó la tercera copa
          La tradición dice que cuando Jesús dijo: “Esta copa es el nuevo pacto de mi sangre derramada por ustedes,” se estaba refiriendo a la tercera copa de la Pascua, la Copa de la redención. Por su sangre derramada podemos ser redimidos de nuestra esclavitud del pecado, así como los israelitas fueron redimidos de su esclavitud en Egipto. Luego dijo que no bebería del vino otra vez hasta que el Reino hubiera llegado.
        4. La cuarta copa queda pendiente
          La cuarta copa queda pendiente, hasta que se cumpla su significado en la redención: “Jesús dijo: «He tenido muchos deseos de comer esta Pascua con ustedes antes de que comiencen mis sufrimientos. Pues ahora les digo que no volveré a comerla hasta que su significado se cumpla en el reino de Dios»” (Lc.22:15-16)
    14. Esto no sucedería sino hasta que las naciones por conquistar lleguen al colmo con sus pecados

      1. Abraham y su descendencia
        El Señor dijo a Abram: Debes saber que tus descendientes vivirán como extranjeros en tierra extraña, donde serán esclavizados y maltratados durante cuatrocientos años. Pero yo castigaré a la nación que los esclavizará, y luego tus descendientes saldrán en libertad y con grandes riquezas. Tú, en cambio, te reunirás en paz con tus antepasados y te enterrarán cuando ya seas muy anciano. Cuatro generaciones después, tus descendientes volverán a este lugar, porque antes de eso no habrá llegado al colmo la iniquidad de los amorreos. (Gn.15:13-16)
      2. Jesús
        Entonces vi una nube blanca y sentado en la nube estaba alguien parecido al Hijo del Hombre. Tenía una corona de oro en la cabeza y en la mano una hoz afilada. Entonces vino otro ángel desde el templo y le gritó al que estaba sentado en la nube: «Da rienda suelta a la hoz, porque ha llegado el tiempo para cosechar; ya está madura la cosecha en la tierra». Y el que estaba sentado en la nube pasó la hoz sobre la tierra, y toda la tierra fue cosechada. Después vino otro ángel desde el templo que está en el cielo, y él también tenía una hoz afilada. Luego otro ángel, que tenía poder para destruir con fuego, vino desde el altar y le gritó al ángel que tenía la hoz afilada: «Pasa ahora tu hoz y junta los racimos de los viñedos de la tierra, porque las uvas ya están maduras para el juicio». (Ap.14:14-18)
    15. El gobernador de la tierra intenta matar al libertador del pueblo de Dios

      1. Moisés
        Entonces el faraón dio la siguiente orden a todo su pueblo: «Tiren al río Nilo a todo niño hebreo recién nacido; pero a las niñas pueden dejarlas con vida». (Ex.1:22)
      2. Jesús
        Cuando ya se habían ido, un ángel del Señor se apareció en sueños a José y dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo». Así que se levantó cuando todavía era de noche, tomó al niño y a su madre y partió para Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes. De este modo se cumplió lo que el Señor había dicho por medio del profeta: «De Egipto llamé a mi hijo». Cuando Herodes se dio cuenta de que los sabios se habían burlado de él, se enfureció y mandó a matar a todos los niños menores de dos años en Belén y en sus alrededores, de acuerdo con el tiempo que había averiguado de los sabios. Entonces se cumplió lo dicho por el profeta Jeremías: «Se oye un grito en Ramá, llanto y gran lamentación. Es Raquel que llora por sus hijos y no quiere ser consolada. ¡Sus hijos ya no existen!». (Mt.2:13-18)
    16. El libertador es resguardado a salvo en Egipto

      1. Moisés
        En eso, la hija del faraón bajó a bañarse en el Nilo. Sus doncellas, mientras tanto, se paseaban por la orilla del río. De pronto, la hija del faraón vio la cesta entre los juncos y ordenó a una de sus esclavas que fuera por ella. Cuando la hija del faraón abrió la cesta y vio allí dentro un niño que lloraba, le tuvo compasión y exclamó: —¡Es un niño hebreo! La hermana del niño preguntó entonces a la hija del faraón: —¿Quiere usted que vaya y llame a una nodriza hebrea, para que críe al niño por usted? —Ve a llamarla —contestó. La muchacha fue y trajo a la madre del niño, y la hija del faraón le dijo: —Llévate a este niño y críamelo. Yo te pagaré por hacerlo. Fue así como la madre del niño se lo llevó y lo crio. Ya crecido el niño, se lo llevó a la hija del faraón y ella lo adoptó como hijo suyo; además, le puso por nombre Moisés, pues dijo: «¡Yo lo saqué del río!». (Ex.2:5-10)

        1. Es llevado al trono para ser puesto a salvo.
          La hija del faraón lo adoptó y lo crio como a su propio hijo. (Hch.7:21)
      2. Jesús
        Cuando ya se habían ido, un ángel del Señor se apareció en sueños a José y dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo». (Mt.2:13)

        1. Es llevado al trono para ser puesto a salvo.
          El dragón se plantó delante de ella para devorar a su hijo tan pronto como naciera. Ella dio a luz un hijo varón que «gobernará a todas las naciones con cetro de hierro». Pero su hijo fue arrebatado y llevado hasta Dios, que está en su trono. (Ap.12:4-5)
    17. Cumpliéndose el tiempo para conquistar la tierra harán la guerra contra los reyes de las naciones

      1. La descendencia de Abraham
        Pero el Señor tu Dios entregará a todas esas naciones en tus manos. Las llenará de confusión hasta que queden destruidas. Pondrá a sus reyes bajo tu poder, y tú borrarás sus nombres de la faz de la tierra. Nadie podrá hacerte frente, y tú los destruirás a todos. (Dt.7:23-24)
      2. La descendencia de Cristo
        Entonces vi el cielo abierto, y había allí un caballo blanco. Su jinete se llamaba Fiel y Verdadero, porque juzga con rectitud y hace una guerra justa. Sus ojos eran como llamas de fuego, y llevaba muchas coronas en la cabeza. Tenía escrito un nombre que nadie entendía excepto él mismo. Llevaba puesta una túnica bañada de sangre, y su título era «la Palabra de Dios». Los ejércitos del cielo vestidos del lino blanco y puro de la más alta calidad lo seguían en caballos blancos. De su boca salía una espada afilada para derribar a las naciones. Él las gobernará con vara de hierro y desatará el furor de la ira de Dios, el Todopoderoso, como el jugo que corre del lagar. En la túnica, a la altura del muslo, estaba escrito el título: «Rey de todos los reyes y Señor de todos los señores». Después vi a un ángel parado en el sol que les gritaba a los buitres que volaban en lo alto de los cielos: «¡Vengan! Reúnanse para el gran banquete que Dios ha preparado. Vengan y coman la carne de los reyes, los generales y los fuertes guerreros; la de los caballos y sus jinetes y la de toda la humanidad, tanto esclavos como libres, tanto pequeños como grandes». Después vi a la bestia y a los reyes del mundo y sus ejércitos, todos reunidos para luchar contra el que está sentado en el caballo y contra su ejército. Y la bestia fue capturada, y junto con ella, el falso profeta que hacía grandes milagros en nombre de la bestia; milagros que engañaban a todos los que habían aceptado la marca de la bestia y adorado a su estatua. Tanto la bestia como el falso profeta fueron lanzados vivos al lago de fuego que arde con azufre. Todo su ejército fue aniquilado por la espada afilada que salía de la boca del que montaba el caballo blanco. Y todos los buitres devoraron los cuerpos muertos hasta hartarse. (Ap.19:11-21)

        1. Josué: tipo de Cristo que los dirige en la guerra contra los reyes de la tierra para conquistar la tierra.
        2. La conquista de Canaán, tipo de la segunda venida.
  3. Macrocódigo

Alberto Vazquez Botello