No Tolerarán La Sana Doctrina

Youtube: https://youtu.be/LefPXOOoADc

  1. Advertencia de Pablo a Timoteo antes de su partida

    En presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de venir en su reino y que juzgará a los vivos y a los muertos, te doy este solemne encargo: Predica la Palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar. Porque llegará el tiempo en que no van a tolerar la sana doctrina, sino que, seguirán sus propios deseos y buscarán maestros que les digan lo que sus oídos se mueren por oír. Dejarán de escuchar la verdad y se volverán a los mitos. Tú, por el contrario, sé prudente en todas las circunstancias, soporta los sufrimientos, dedícate a la evangelización; cumple con los deberes de tu ministerio. Yo, por mi parte, ya estoy a punto de ser ofrecido como un sacrificio, y el tiempo de mi partida ha llegado. He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, me he mantenido en la fe. Por lo demás me espera la corona de justicia que el Señor, el juez justo, me otorgará en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que con amor hayan esperado su venida. (2Ti.4:1-8)

  2. El mensaje del evangelio, la sana doctrina, no es atractiva al mundo.

    Predicamos que la verdadera fe

    1. A cambiar nuestra pasada manera de vivir

      En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, 24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. (Ef.4:22-24)

    2. Implica un cambio de prioridades

      Ya que han resucitado con Cristo, busquen las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la derecha de Dios. Concentren su atención en las cosas de arriba, no en las de la tierra, pues ustedes han muerto y su vida está escondida con Cristo en Dios. (Col.3:1-2)

    3. Implica la negación personal

      Luego dijo Jesús a sus discípulos: ―Si alguien quiere ser mi discípulo, tiene que negarse a sí mismo, tomar su cruz y seguirme. (Mt.16:24)

    4. El estar dispuesto a perder (invertir, sacrificar) esta vida por su causa

      Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa, la encontrará. (Mt.16:25)

    5. A estar dispuesto a sufrir por su voluntad, por su causa, por su iglesia

      Pues a ustedes se les dio no solo el privilegio de confiar en Cristo sino también el privilegio de sufrir por él. (Fil.1:29)

    6. A una vida de santidad

      fundamentos, tales como el arrepentimiento de las obras que conducen a la muerte (He.6:1)
      Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. (He.12:14)

    7. Una vida rechazada por el mundo

      Si pertenecieran al mundo, el mundo los amaría como a uno de los suyos, pero ustedes ya no forman parte del mundo. Yo los elegí para que salieran del mundo, por eso el mundo los odia. (Jn.15:19)

    8. Dura palabra

      1. Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaum. Al oírlas, muchos de sus discípulos dijeron: Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír? 61 Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os ofende? (Jn.6:59-61)
      2. Entonces los discípulos se acercaron y le preguntaron: —¿Te das cuenta de que has ofendido a los fariseos con lo que acabas de decir? 13 Jesús contestó: —Toda planta que no fue plantada por mi Padre celestial será arrancada de raíz, 14 así que no les hagan caso. Son guías ciegos que conducen a los ciegos, y si un ciego guía a otro, los dos caerán en una zanja. (Mt.15:12-14)
  3. ¿Porqué aceptamos tan duro mensaje?

    1. Porque sabemos que nuestra esperanza no es solo para este mundo sino principalmente la vida que viene.

      1. Y si nuestra esperanza en Cristo es solo para esta vida, somos los más dignos de lástima de todo el mundo. (1Co.15:19)
      2. el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad (Ro.2:6-7)
    2. Porque sabemos que las pruebas y sufrimientos nos conforman a su imágen y nos añaden un mayor peso de gloria eterno

      1. Es por esto que nunca nos damos por vencidos. Aunque nuestro cuerpo está muriéndose, nuestro espíritu va renovándose cada día. 17 Pues nuestras dificultades actuales son pequeñas y no durarán mucho tiempo. Sin embargo, ¡nos producen una gloria que durará para siempre y que es de mucho más peso que las dificultades! 18 Así que no miramos las dificultades que ahora vemos; en cambio, fijamos nuestra vista en cosas que no pueden verse. Pues las cosas que ahora podemos ver pronto se habrán ido, pero las cosas que no podemos ver permanecerán para siempre. (2Co.4:16-18)
      2. También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter, y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación. Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor. (Ro.5:3-5)
    3. Porque sabemos que es la única oportunidad que tenemos de mostrar un amor sacrificial por Dios y su cuerpo.

      1. Pues a ustedes se les dio no solo el privilegio de confiar en Cristo sino también el privilegio de sufrir por él. (Fil.1:29)
      2. Por tanto, todo lo soporto por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna. (2Ti.2:10)
    4. Porque sabemos que lo más importante, lo único que nos satisface, es tenerlo a él

      1. Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo. Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol, a fin de ganar a Cristo y encontrarme unido a él. (Fil.3:7-9)
      2. ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. (Sal.73:25)
    5. Porque estamos conscientes que hay un castigo eterno que recibiremos si persistimos vivir en nuestros propios caminos

      1. Pero, al ver que muchos fariseos y saduceos llegaban adonde él estaba bautizando, les advirtió: «¡Camada de víboras! ¿Quién les dijo que podrán escapar del castigo que se acerca? Produzcan frutos que demuestren arrepentimiento. No piensen que podrán alegar: “Tenemos a Abraham por padre”. Porque les digo que aun de estas piedras Dios es capaz de darle hijos a Abraham. 10 El hacha ya está puesta a la raíz de los árboles, y todo árbol que no produzca buen fruto será cortado y arrojado al fuego. (Mt.3:7-10)
  4. En cambio lo que la gente busca

    1. No es morir a sus deseos engañosos, sino la manera de alcanzarlos
    2. No la regeneración de personas, sino aumentar el número de sus congregantes.
    3. No la santidad ni los estándares de Dios, sino la mediocridad espiritual de una vida religiosa y terrenal.
    4. No el sacrificio ni la abnegación, sino la bendición y la recompensa presente.
    5. No la vergüenza y la humillación, sino el éxito de este mundo.
    6. No la incomodidad del verdadero evangelio, sino un pseudo-evangelio políticamente correcto que te haga ver bien.
  5. Los maestros que predican un mensaje que alimenta la carne

    1. Tienen sus iglesias ricas y llenas

      Escribe al ángel de la iglesia de Laodicea: Esto dice el Amén, el testigo fiel y veraz, el soberano[c] de la creación de Dios: 15 Conozco tus obras; sé que no eres ni frío ni caliente. ¡Ojalá fueras lo uno o lo otro! 16 Por tanto, como no eres ni frío ni caliente, sino tibio, estoy por vomitarte de mi boca. 17 Dices: “Soy rico; me he enriquecido y no me hace falta nada”; pero no te das cuenta de cuán infeliz y miserable, pobre, ciego y desnudo eres tú. 18 Por eso te aconsejo que de mí compres oro refinado por el fuego, para que te hagas rico; ropas blancas para que te vistas y cubras tu vergonzosa desnudez; y colirio para que te lo pongas en los ojos y recobres la vista. 19 Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Por lo tanto, sé fervoroso y arrepiéntete. 20 Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré, y cenaré con él, y él conmigo. (Ap.3:14-18)

    2. Y son queridos por todos

      !Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas. (Lc.6:26)

  6. Tenemos que tener cuidado de nosotros mismos, no sea que caigamos en lo mismo, y “queramos hacer el mensaje más atractivo”

    Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren. (1Ti.4:16)

    1. El mensaje del evangelio en su integridad ya es atractivo por si mismo, Dios no necesita tu ayuda ni que lo maquilles.

       

      1. Nuestras vidas son la fragancia de Cristo que sube hasta Dios, pero esta fragancia se percibe de una manera diferente por los que se salvan y los que se pierden. 16 Para los que se pierden, somos un espantoso olor de muerte y condenación, pero para aquellos que se salvan, somos un perfume que da vida. ¿Y quién es la persona adecuada para semejante tarea? (2Co.2:15-16)
      2. Ya que Dios, en su sabiduría, se aseguró de que el mundo nunca lo conociera por medio de la sabiduría humana, usó nuestra predicación «ridícula» para salvar a los que creen. 22 Es ridícula para los judíos, que piden señales del cielo. Y es ridícula para los griegos, que buscan la sabiduría humana. 23 Entonces cuando predicamos que Cristo fue crucificado, los judíos se ofenden y los gentiles[e] dicen que son puras tonterías. 24 Sin embargo, para los que Dios llamó a la salvación, tanto judíos como gentiles,[f] Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios. 25 Ese plan «ridículo» de Dios es más sabio que el más sabio de los planes humanos, y la debilidad de Dios es más fuerte que la mayor fuerza humana. (1Co.1:24-25)
    2. Cuando predicas el evangelio en su integridad, a pesar del rechazo que te ocasione te prueba como siervo de Dios

      Ya ven, no somos como tantos charlatanes que predican para provecho personal. Nosotros predicamos la palabra de Dios con sinceridad y con la autoridad de Cristo, sabiendo que Dios nos observa. (2Co.2:17)

Alberto Vazquez Botello